El camafeo o Cameo (termino en ingles correspondiente a camafeo) es una joya, o dije, que siempre ha sido muy bien valorada Aunque actualmente ha perdido vigencia sigue siendo apreciado por ser el símbolo de una hermosa época para las mujeres. En otra época esta joya fue considerada como un preciado regalo.
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Todo sobre los camafeos
Los camafeos son tallados en relieve sobre una piedra preciosa que usualmente debe ser un ónix, aunque puede ser tallado sobre cualquier otra piedra preciosa que sea dura y sobre la cual se pueda tallar el alto relieve. El tallado se realiza en piedras preciosas de color oscuro y con figuras de trazos delicados. Se elaboran con la técnica de la filigrana, es decir con hilos de oro o plata entrelazados formando una delicada figura.
Las piedras más idóneas para tallar un cameo son el ágata y el ónix para aprovechar la diferencia de colores que muestra las capas de cada una de estas piedras de tal manera que al pulir y rebajar la primera capa la segunda queda como fondo y la primera forma el alto relieve de la figura tallada. En algunas oportunidades estas joyas son falsificadas con vidrios y esmaltes soldando un relieve de piedra o vidrio con otra piedra de otro color. Realmente los camafeos son el resultado de una forma muy particular de expresión de la escultura. Esta expresión y técnica se ha utilizado también en la elaboración de sellos, artículos de decoración delicadamente trabajados así como también en tallas de vírgenes y santos, etc.
Historia de los camafeos o cameos
Históricamente los camafeos o cameos han tenido sus altos y bajos. Entre los siglos XIV y XV, se elaboraron en nácar en Francia y Alemania por lo que llegaron a ser altamente apreciados y valorados por la realeza francesa. Posterior a la colonización, llegaron a Europa materias primas exóticas del nuevo continente tales como colmillos de elefante y rinoceronte, ámbar, jade, caparazones de tortugas y conchas marinas exóticas, y los camafeos comenzaron a elaborarse en estos materiales por parte de joyeros y artesanos lo que condujo a que estos fuera poco cotizados debido a que se les consideraba como imitaciones por ser elaborados con materiales de menor valor.
En el siglo XV vuelven a ser medianamente valorados gracias a Lorenzo el magnífico pero pasan de moda rápidamente aunque Isabel primera y Catalina la grande fueron arduas usuarias de estas joyas tan cotizadas en algunas épocas. Pero realmente es en el siglo XIX cuando la Reina Victoria los pone de moda con características muy particulares y similares a los que conocemos hoy. Sabemos que en algún momento los nobles usaban cameos tallados en esmeraldas y rubíes de tamaño moderado tallados en sus anillos. Entre 1860 y 1880, en Italia, orfebres artesanales fabricaron camafeos en oro, dándole vida nuevamente a los camafeos, hasta llevarlos de lo clásico a lo erótico. La proliferación de zarcillos de la época barroca en la actualidad imitando a los camafeos de aquella época pero en pasta y cristal es la moda. En el siglo XX fue muy normal la confección de camafeos en oro de 9 quilates o en plata.
Entre las características que debe cumplir un camafeo resaltan las siguientes:
- Su fondo debe ser negro rojo coral con el alto relieve en color crema o blanco.
- Se pueden tallar escenas mitológicas greco-romanas, aunque tradicionalmente se talla una efigie de una joven mujer o flores.
- Fueron usados en algún momento como insignias por los emperadores romanos.
¿Cómo saber si un camafeo (cameo) es auténtico?
- Los materiales en los que están elaborados los camafeos (cameos) auténticos pueden ser conchas o piedras naturales, como ágata, cornalina, ónix, marfil, azabache, hueso, entre otras, por lo que cualquier camafeo elaborado en un material natural (no sintético) es considerado autentico.
- Un camafeo se considera falso si está elaborado en de plástico o resina.
- Si observas tu cameo a contraluz y este por muy antiguo que sea no presenta ninguna raya, daño o grieta, estas ante un camafeo Los de plástico se rayan con mucha facilidad, aunque los de resina dura se rayan con menos facilidad. Un camafeo rayado podría ser autentico pero el tener algún daño en su superficie por mínimo que sea le resta valor a la hora de avaluarlo.
- La dirección hacia la cual ira la efigie en alto relieve del camafeo también puede indicar una pista de su autenticidad pues lo auténticos y antiguos cameo en su mayoría tiene grabada en alto relieve una efigie mirando hacia la derecha, la segunda posición en la que podría estar es hacia la izquierda, y muy raro es que la efigie este mirando al frente.
- Rasgos de la cara. Un cameo autentico ha sido esculpida con mucho detalle donde se puede apreciar por ejemplo la curvatura natural de mentón y boca y usualmente la efigie tiene mejillas redondeadas.
- Dale la vuelta a tu joya y observa el broche, si el cierre es sencillo, muy probablemente este ante la presencia de un camafeo Este tipo de broches tienen un pequeño alfiler que se engancha directamente en la pieza de metal, sin ningún otro mecanismo que lo sustente.
- Algunos camafeos auténticos están montados en un marco de oro de 18 quilates. También es normal que tengan marco de metal cualquier otro metal.
- Los camaeos de plástico o resina suelen pesar más que los de metal, conchas o nácar, por lo que un cameo muy pesado es de dudosa autenticidad.
En la actualidad los camafeos son considerados como una pieza clásica de joyería, por lo que es muy importante tener en cuenta en que base se va colocar, tales como broches anillos pulseras y dijes, dependiendo de cuál sea la utilidad que se le dará al mismo, este puede ser utilizado para dar un toque delicado y especial a una blusa, un pañuelo, un bolso, adornar la mano, la muñeca o el cuello de una mujer.
Cuando estés considerando comprar un cameo debes tener en cuenta que el mismo debe tener un perfil que represente a una mujer fina, bella y elegante, tanto el cameo en si como la base sobre la cual será colocado el camafeo.
